La invitación

Te invito a sentarte junto a mi, a mi lado, sentarte en la naturaleza para escuchar la verdad de tu alma... te invito a poder cerrar los ojos para dejarte deslumbrar por tu cálida luz interna.

Te invito a poner atención en el sonido de tu respiracion para dejar que tu ser se vuelva hacia ti.

Te invito a sentir como tu corazón en su máxima expresión de amor, toca el resto de organos y todos los elementos que componen tu cuerpo fisico interno hasta llegar a tu piel.

Te animo a sentir el mar en tu vientre, como las olas del mar parecen acariciar tu útero y como la luna os rige a ambas.

Te invito a estirar tu cuerpo hasta re-descubrir que tienes brazos, piernas, ojos labios... para que puedas conectar con la maravilla que es tu cuerpo.

te invito a crear un espacio especial en tu interior para llegar a lo más puro que tienes.

Te invito a cuidar y mimar cada parte de tu cuerpo como si fueras el bebé más sagrado.

Y, a dejarte conducir suavemente a un mágico descanso, para poder conectar con el mundo de los sueños, envuelta en ese amor que es auténtica sanación para todo tu ser...

Cuando cierro mis ojos y me sereno, puedo sentir..

Un susurro venido del viento, una pequeña y suave brisa, nada más, me recuerda quien soy y la razón por la que sigo aqui, un dia más.

Y mi pelo se desordena, y felizmente juega con mi cara sorprendida mientras sale de su concentración en las tareas habituales del dia.

Y entonces comienzo a sonreir, primero muy adentro, como una luz que comienza a brillar en la parte más interior de mi corazón, una luz que se convierte en una llama flameante que poco a poco inunda mi corazon hasta abarcar mi pecho y envolver mi cuerpo hasta llegar al aura.

Con esta sensación de SER recupero mis ritmos naturales, mis decisiones son más lentas, mas sabias. Una profunda sensación de certeza llena mi cuerpo y consigo que se relaje tras el arduo trajin y esfuerzo que me obliga mi mundo externo.

Y siento que se para todo a mi alrededor, que lo importante cobra protagonismo y la compasion y amor incondicionales aparecen de forma natural. Permito fácilmente que estos sentimientos los pueda percibir hacia mi misma y mis circunstancias y también hacia las personas que me rodean y hacia las situaciones que comparto con ellas.

Y comienza a sonar una musica que parece venir del universo y que puedo sintonizar a través de mi alma. Son canciones tan bellas, tan alegres, me cuentan historias ancestrales que hablan de historias pasadas, que cuentan cuentos y percibo que me dicen que entre todos los seres del planeta estamos creando magia de la de verdad... esa con la que se crean los sueños que se cumplen.

Y en ese momento, me quedo sin palabras, en mi lugar de silencio y sé que si miro con atención te podré encontrar a ti, y podremos sentirnos y percibirnos tal y como somos, de corazón a corazón...

El descanso

Y fue en ese preciso instante, aquel en el que tomé la decisión, cuando todo mi mundo cambió. Como si me hubiera ido a otra sala de proyección de un cine de muchas salas. 

Me di cuenta de la intensa fuerza de mis pensamientos... cómo pudo ser, que tras tomar una decisión, tan solo una, mil rostros conocidos aparecieran frente a mi, hablandome como quien retoma una conversación familiar, como quien aparece de repente en un lugar que reconoce pero que todavia no ha visto en esta vida. Y aún así, todo parece normal.

Y mientras mi mente daba vueltas y vueltas, incluso mis pies mudaron su calzado y la brisa empezó a mover mi ropa que también se rehizo de nuevo.Cuantas veces no habremos vivido estas situaciones sin habernos dado verdadera cuenta... Yo era la primera vez que lo hacia y mientras esperaba a que todo se ordenara de nuevo. No sabia en qué lugar, en qué tiempo ni en quien acabaria siendo representada por mi cuerpo, pero solo queria que el proceso finalizara.

al tardar tanto, también pensé... puede ser que mi decisión tenga muchisimas opciones y no haya emitido con claridad un rumbo...

Y seguian apareciendo lugares y sonrisas y palabras amables... incluso los ojos de un niño lleno de tristeza me pareció bellamente emocionante.Todo paró. Y se hizo un silencio, una oscuridad en la que me costaba respirar... quien era, donde estaba, preguntas y más preguntas se agolpaban en mi cabeza.

Solo puede calmarme atendiendo a mi respiración..

Y abrí los ojos: una luz inmensa estaba parada justo frente a mi. Yo sentia que me sonreia y me miraba con un cálido amor que me hacia sentir cada vez mas tranquila.

Quien eres? Pensé...

No escuché nada, tan solo me seguia sintiendo observaba por sus ojos invisibles.

Y de pronto vino a mi mente una palabra: busca el centro... tu centro... ese lugar dentro de ti...

Y de nuevo esa luz volvió a aparecer en mi mente. Y poco a poco se amplio esa misma luz... habia muchas lucecitas y miradas amables. Lo increible para mi era que sentia que las conocia, hubiera saltado de alegria, si no hubiera sino tan apabullante la sensación de amor en la que me sentia envuelta.Bienvenida a casa, me dijo ese mismo ser. Y me condujo a una sala blanca, tan blanca y hermosa que parecia no tener ni color.

Y allí fue donde vi algo muy parecido a una cama. Me sentia muy cansada... y me tumbé a dormir sin querer ni siquiera mirar mi cuerpo... solo queria abandonarme descansar mi mente y la agitación de tantas emociones...Y fue así, como yo vine a esta tierra y como pude escribir estas letras para mi y también para ti, que las lees.

Feliz descanso, deseo que tus sueños te lleven a tu Hogar para que recuperes fuerza, esperanza y confianza en que todo pasa por razones superiores a nuestro entendimiento terrenal, pero que nuestro alma comprende perfectamente.

Tan solo escuchandola, recuperarás el sentido de tu vida.

Regresa la Magia

Mis pies descalzos caminaban rapida y cuidadosamente por el prado que nos conducia al lugar de encuentro. Podia haber llegado con los ojos cerrados, tantas veces habia recorrido ese camino... Y justo en medio del maravilloso bosque de altosárboles, la brisa me regaló un olor a rosas, venido sin duda de mi madre, que siempre me acompaña desde donde esta. Cerré los ojos e inspiré la sensación cálida y protectora que desprenden las rosas con su aroma.

Toqué dos troncos de dos árboles hermanos y sentí su alegria de pertenecer al bosque. Y al percibirla, me recordó que me tocaba reencontrarme con mis hermanas. Y comencé a caminar de nuevo bien rápido a pesar de las muchas piedras del desigual camino. Al llegar, todavia no habia amanecido, apenas el sol comenzaba a aparecer tímidamente. Abrí mi hatillo y dejé caer suavemente mis hierbas, piedras, y botecitos con esencias.

 Invoqué a la Madre, y susurré palabras de ayuda y protección, de amistad y de sanación. Recorri el circulo tocando cada una de las piedras, sintiendo como todas ellas tenian algo que recordarme y justo en el centro, me tumbé, me permití sentir la hierba en mi piel, la tierra llenandome de su amor y el viento aclarando mi mente. Fui a llamar al agua y pedirle su presencia a la pequeña fuente que habia cerca y tranquilamente comencé a hacer un fuego.

Mis compañeras de camino, mis hermanas fueron apareciendo de una forma suave y sutil, y podria escuchar el roce de sus vestidos mientras cada una hacia sus tareas, casi de memoria. Pareciamos bailarinas danzando movimientos sincrónicos armoniosos... Eramos belleza en movimiento... tal vez poesia hecha persona.

Y cuando todo estaba ya preparado, cada una buscó su piedra guardiana y se colocó delante de ella. Y nuestras manos se unieron... nos miramos a los ojos. A través de mis hermanas solo veia brillo, regocijo y alegria de compartir una vez más un encuentro mas que sagrado.

Nuestras voces cantando... nuestras peticiones habladas, la fuerza de nuestras manos unidas, la redondez del circulo unido por el corazón único y la presencia de la Madre Tierra y el Padre Cielo hicieron que olvidaramos quienes eramos y donde estabamos, que tan solo la magia nos envolviera...

Y en nuestra ultima canción de despedida cuando nuestras manos se desunieron, miré a mis hermanas como quien mira a un extraño, queria verlas como si no las conociera para ver la belleza que habia en cada una de ellas. Y aún las quise más. Y los abrazos, las risas, el chocolate y nuestro compartir hicieron que nuestras vidas conectasen con lo esencial, mas alla de cualquier circunstancia menos agradable.

Al volver a casa, con mis pies descalzos, mientras subia las escaleras de mi casita de madera, supe que algo habia cambiado, habia fuego en mi hogar y unas risas tal vez nuevas... qué nueva alegria habia venido a mi vida?
Respiré hondo y abri la puerta... la sorpresa fue... uno de los mejores regalos de mi vida.

Y lo abracé, como quien abraza a personas que ha llamado toda su vida y que, por fin, aparecen.